
a irrupción de nuevas formas de comunicar junto a las de producción de mensajes, textos e imágenes, en diferentes plataformas digitales, aparejados a la Inteligencia Artificial, plantean serios retos al periodismo y a los medios de comunicación social, como modelo de negocios y como sobrevivencia del oficio, para periodistas, hombres y mujeres de carne y hueso que con su trabajo deben llevar el sustento a sus hogares.
Por eso, comunicar, resistir, innovar y adaptarse a los cambios tecnológicos actuales imponen repensar una estrategia de permita continuar con el servicio a la sociedad del periodismo que por siglos ha representado la prensa, bautizada en algunos tiempos como “el cuarto poder” o en algunos casos como el primer poder, justamente por la influencia que tenemos, o de elevar la imagen de las autoridades o de tumbarlas, como ha ocurrido con el legendario caso de “Water Gate” en 1974, que provocó la renuncia del presidente de Estados Unidos, Richard Nixon.
Vale la pena recordar que el término cuarto poder alcanzó la popularidad cuando el escritor y filósofo escocés Tomas Carlyle atribuyó dicha expresión al escritor, orador y político anglo-irlandés, famoso e influyente en su época, Edmund Burke, quien la pronunciaría en el debate de apertura de la Cámara de los Comunes del Reino Unido en 1787. En su discurso, Burke dijo que había tres poderes en el Parlamento; señalando que en la tribuna de prensa era donde se sentaba el cuarto poder, de lejos, más importante que todos ellos. Cabe destacar que en ese momento la prensa ocupaba el cuarto espacio de los escaños en el Parlamento inglés, al lado de quienes ocupaban los otros tres: los Lores Espirituales (representantes de la iglesia), los Lores Temporales (la nobleza) y los Comunes (los políticos).
Pero eso es pasado y hay nuevos protagonistas en el escenario de la comunicación social. Según el último reporte global de We Are Social (Data Reportal), la agencia líder mundial en gestión de social media, las redes sociales más usadas y populares en el mundo, ordenadas por millones de cuentas, son: Facebook (3.049), YouTube (2.491), WhatsApp (2.000), Instagram (2.000) y TikTok (1.562).
Y una de las redes que ha crecido vertiginosamente es el Tik Tok, que nace bajo el nombre de Douyin en China, en septiembre de 2016, como una App para grabar, editar y compartir vídeos cortos. desarrollada por la empresa china ByteDance, que también posee Toutiao, un agregador de noticias muy popular en el país asiático.
Y la Inteligencia Artificial, nombrada así en 1956 por el informático estadounidense John McCarthy en 2019, ha sido definida por la UNESCO como un campo que implica máquinas capaces de imitar determinadas funcionalidades de la inteligencia humana incluidas características como la percepción, el aprendizaje, el razonamiento, la resolución de problemas, la interacción lingüística e incluso la producción de trabajos creativos.
Para analizar esos cambios se han desarrollado conferencias en las universidades Utepsa y Domingo Savio de Santa Cruz, en la tercera semana de febrero, a las que han asistido principalmente periodistas y comunicadores sociales.
“Ustedes le ponen lo artificial a la inteligencia”, afirmó el experto en marketing y redes sociales Mariano Cabrera al explicar que esta nueva tendencia tecnológica necesita necesariamente la intervención de un ser humano y, por eso, de ninguna manera puede sustituir al periodista, recomendando, por el contrario, que en vez de verla como enemiga, debe ser una aliada, en lectura y análisis de audios, videos y textos, entre otros.
Por otro lado, “Trabajar una marca personal, usar multiplataformas digitales y ser creativos”, recomendó el especialista en redes sociales, Rodrigo Tobar, al hablar sobre cómo monetizar con el Tik Tok, pues hoy cada vez aumenta la tendencia de informarse por esa plataforma, dejando en el olvido a la televisión, radio y diarios.
Para periodistas como el autor que llevan mas de 30 años en el oficio y que archivó la máquina de escribir por la computadora, la tesis de ambos especialistas me deja tranquilo porque confirman que hay algo que nunca pasará de moda: ES EL PODER DE LA PALABRA, herramienta que nosotros dominamos y que debemos repensar su uso en cualquiera de las plataformas o canales de expresión.
El naturalista inglés, Charles Darwin, creador de la teoría de la evolución, nos decía que aquellas especies que no son capaces de adaptarse a su entorno, sencillamente mueren.
Roberto Méndez Herrera es periodista y abogado.
El presente artículo de opinión es de responsabilidad del autor y no representa necesariamente la línea editorial de Datápolis.bo.