leva 13 años como magistrado de justicia. Gonzalo Hurtado fue miembro del Tribunal Supremo de Justicia entre 2012 y 2017 y ejerce como miembro del Tribunal Constitucional prorrogado desde 2018 hasta la fecha. Gonzalo Hurtado practicó el pasanaku judicial y es autor de la prórroga de mandato de los magistrados que debieron cesar en sus funciones el 2 de enero de este año.
Su larga carrera como magistrado de los más altos tribunales de justicia ordinaria y justicia constitucional, ahora en condición de tribuno prorrogado, le dio la opción de ser elegido este lunes como presidente del Tribunal Constitucional Plurinacional prorrogado por una sentencia promovida por el mismo a fines del año pasado.
Cinco votos de los presentes en la Sala Plena del TCP prorrogado convirtieron en presidente al autor de los últimos fallos que, por ejemplo, fraccionaron las elecciones judiciales del 15 de diciembre y consolidaron la inhabilitación de Evo Morales, dejándolo sin sigla partidaria.
La decisión fue asumida luego de que se considerara una “ausencia injustificada” del titular, Paul Enrique Franco, en tres sesiones continuas de Sala Plena.
La Sala Plena en la que se tomó esta determinación había sido convocada inicialmente por Franco, el pasado jueves, y continuó sesionando en su ausencia, hasta hoy, bajo la conducción del propio Hurtado, como decano de la institución.
Paul Enrique Franco Zamora nació en Potosí y fue electo por el departamento de Chuquisaca. Se desempeñó como presidente del TCP desde el 20 de noviembre de 2019 hasta este lunes 25 de noviembre de 2024.
Gonzalo Miguel Hurtado Zamorano, en cambio, es magistrado del departamento de Beni. En 2011 fue electo magistrado del Tribunal Supremo de Justicia, el que llegó a presidir, y luego como magistrado del TCP en las elecciones judiciales de 2017.
En 2019, el entonces director de la fuerza antidrogas, Maximiliano Dávila, lo vinculó con el narcotraficante Pedro Montenegro. Mediante un comunicado público, Hurtado negó tener alguna relación con el sentenciado en Brasil, en 2021, a más de 11 años de prisión.
