omo hace 40 años, cuando Ronald Reagan juró a la presidencia de Estados Unidos, el frío extremo en Washington hizo que Donald Trump cambie de planes para su posesión y asumirá por segunda vez como presidente de su país dentro del Capitolio, informaron medios internacionales.
Trump comunicó que su toma de posesión, este lunes a mediodía, se realizará en un ambiente cerrado del Capitolio debido al clima gélido esperado, lo que socava las esperanzas del republicano de un espectáculo grandioso a cielo abierto para dar inicio a su segundo mandato, luego de convertirse en el presidente número 47 de su nación.
“Hay una ráfaga de viento ártico que está arrasando el país”, escribió Trump en su cuenta de Truth Social. “Por lo tanto, he ordenado que el discurso inaugural, además de las oraciones y otros discursos, se pronuncie en la Rotonda del Capitolio de los Estados Unidos”, anunció.
"Mucha gente ha quedado un tanto decepcionada aquí en Washington porque querían participar en la toma de posesión de Donald Trump; habrá cambios también para los medios acreditados a la cobertura de este importante hecho", informaron cadenas de televisión hispanas desde Washington.
Trump no pondrá su mano en la Biblia ni jurará como presidente de Estados Unidos en la escalinata del Capitolio con vista al National Mall, que tradicionalmente recibe a una gran multitud para dar la bienvenida a los nuevos presidentes.
Debido al extremo frío en Washington, que este lunes podría bajar los termómetros a -12 grados centígrados, La Rotonda, un salón circular adornado debajo de la cúpula del Congreso que puede albergar a unos cientos de personas, será el lugar de la juramentación.
Trump de 78 años dijo que las ceremonias en La Rotonda “serán una experiencia muy hermosa para todos, y especialmente para la gran audiencia televisiva”.
“El lunes abriremos el Capital One Arena para ver en vivo este evento histórico y para albergar el desfile presidencial. Me uniré a la multitud en el Capital One después de mi jura”, añadió.
Se pronostica que el lunes la temperatura en Washington estará muy por debajo del punto de congelación, con fuertes vientos que se sumarán al frío.
Es la primera vez que se toma esta medida de emergencia desde la investidura de Ronald Reagan en 1985, también debido al clima peligrosamente frío.
