a Policía chilena ha detenido este miércoles a miembros de Los Piratas de Aragua, una célula del Tren de Aragua involucrada en al menos 10 casos investigados por la Fiscalía en Chile, incluyendo los crímenes del teniente de Carabineros Emmanuel Sánchez y del disidente venezolano Ronald Ojeda, en un masivo operativo en la Región Metropolitana de Santiago.
Según la Policía de Investigaciones (PDI), de momento existen cuatro detenidos, de los cuales dos pertenecen a la banda internacional y uno de ellos es responsabilizado de haber enterrado el cadáver de Ojeda tras ser asesinado el año pasado. La cifra podría aumentar, dado que todavía está en curso la operación policial, informó El País de Madrid.
Otros medios internacionales informaron que la justicia chilena confirmó que la banda Los Piratas de Aragua, célula del Tren de Aragua, fue contratada por la dictadura de Nicolás Maduro para eliminar a Ojeda, dejando atrás la hipótesis de que sicarios de esa organización criminal viajaron desde Venezuela para matar al militar disidente.
Los arrestos y allanamientos a domicilios se han practicado desde la madrugada de este miércoles en los municipios de Estación Central, San Miguel y Maipú, donde fue hallado el cuerpo de Ojeda el 1 de marzo del año pasado, enterrado bajo cemento.
El fiscal general, Ángel Valencia, dijo que se ha propinado “un golpe importante” a una agrupación criminal que ha cometido decenas de crímenes en Chile. “Es una operación internacional. Junto con lo que ocurre en este momento en el territorio nacional, también estamos recibiendo cooperación de policías en el extranjero”, afirmó.
Las operaciones criminales del Tren de Aragua, de origen venezolano, se expanden desde Chile hasta Estados Unidos, donde el presidente Donald Trump ha designado a la pandilla como una organización terrorista internacional. El procedimiento policial en Santiago ha estado precedido por la detención el 30 de diciembre del líder de Los Piratas en Texas, Estados Unidos, Rafael Enrique Gámez Salas, apodado el Turco, por delitos como secuestros, trata de personas, entre otros, según confirmó el fiscal regional Héctor Barros, a cargo de la investigación del crimen de Ojeda.
A esta facción del Tren de Aragua, mayormente integrada por extranjeros, se le atribuye el secuestro y homicidio del exteniente del Ejército venezolano, quien tenía condición de refugiado político en Chile. Ocurrió el 21 de febrero de 2024. El caso ha provocado tensiones diplomáticas entre Santiago de Chile y Caracas.
Carolina Tohá, ministra del Interior de Gabriel Boric, que ha respaldado el trabajo de Barros, ha evitado referirse a las últimas declaraciones del fiscal, que vinculan directamente al régimen de Nicolás Maduro con el homicidio de Ojeda, porque no le parece “útil entrar en polémicas respecto a antecedentes que hoy en día no están a la vista” y por no conocer la carpeta investigativa, según explicó.